sábado, 25 de marzo de 2017

-No me avergüenza hablar de frente. Pensaba que eso era lo que te gustaba de mí. Mi forma de ser transparente.
Imaginar que puedes dejar de amarme, me resulta mucho peor que las reglas, como tú dices, que me he marcado. Sé que somos dos personas como cualquiera y que bien podríamos estar juntos, pero, ¿hasta cuándo? Si somos personas normales, ¿hasta cuándo durará nuestro amor? El amor eterno no existe, ni siquiera en los libros. Amarse es amarse por un tiempo. No se obrará el milagro; no somos más fuertes que los otros. Si me entrego a ti acabarás distanciándote.

-Parece que no confías mucho en mí

-No soy idiota. Eres muy guapo, gustas a todo el mundo, has conocido a muchas mujeres. Y como a ellas un día me dejarás por otra que encontrarás más deseable, y eso no lo soportaré. Sin hablar de los celos; solo esa carta…fíjate cómo me puso. Pensaría siempre que te ama otra y que tú la amas. Quizá fuera capaz de sobrellevarlo, otras lo hacen.

-No pasará. No puedes pelear sola contra lo que sientes. Porque yo estoy armado y no voy a dejar que lo hagas. ¿Te veré mañana?-.

-No-.